lunes, 13 de agosto de 2018

NADA ES PARA SIEMPRE


Cuando despiertes, más 
temprano, porque empieza la semana, 
y no como anteayer, 
que saliste del sueño tipo once, 
y aun hubieras dormido 
un rato más, las nubes que mordían, 
hace unas horas, roncas 
de jorobar, tu tímida conciencia, 
habrán partido. ¿Viste? 
También al mal le toca disiparse. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario