UNA CALLE ES UNA CALLE ES UNA CALLE
Ya se va sosegando
el día. Todavía
pasa algún que otro coche
con ruedas de pisar.
El asfalto soporta
a esos zombies que ruedan
cansinos hacia el este
y no se queja nunca.
Será que nunca tuvo
un alma que medite
sobre la mansedumbre
que es estar para el otro.
Será que el alma sabe
de ese negror que calla.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario