COCOROCÓ
A veces te supera
tu superyó y hacés
gala de tus poderes
de rigoraje. Tiemblo
cuando me sermoneás,
pero más tiemblo porque
te veo barajada
por ese desgraciado,
de que me hacés partícipe.
Obvio que tengo cosas
bastante criticables,
pero si vieras cómo
te afea y si sin mufa
me trataras, verías
cómo sin vueltas soy
de hacer lo que es debido.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario